fbpx

 

Por Adry Paniagua.

Como artista aérea, trabajando en el circo, día a día ponemos nuestra vida y seguridad en
riesgo, es por eso que quisiera entrar en contexto y compartirles lo siguiente.

Hace poquito más de un año, viví lo que cualquier artista, poledancer, deportista o
acróbata teme pasar en su vida, en escenarios, en la pista o en donde sea… Tuve un
accidente mucho mayor de lo que hubiera querido y afortunadamente con resultados mil
veces menos graves que todo lo pronosticado y ni remotamente cercano a lo que pudo
haber pasado, me hayan dicho en el hospital o pude haber imaginado; y claro, recuerdo
perfecto en ese momento pensar “¿y si ya no puedo volver a volar?”… “¿si mi cuerpo ya no
puede volver a funcionar igual?”.

Y pues, sí amig@s… Nuestro cuerpo después de un accidente grave NO vuelve a ser igual, y
claro que hay frustración, miedos, dolor… peroooooo… tenemos algo sumamente
poderoso con nosotr@s. Y sí, quizá suena a cliché… pero juro que es cierto y día con día lo compruebo.

En lo personal soy sumamente terca, yo pensaba cuando los médicos hablaban conmigo,
“no me conocen, lo que me están diciendo sí es una posibilidad, pero le voy a ganar a todos
esos pronósticos horribles”, totalmente me refiero a NUESTRA MENTE y mmm “coraje
(¿?)”, “be brave (¿?)”, ese arder en el corazón que te dice, “¡¡¡NO TE RINDAS, TÚ
PUEDES!!!”.

En mi caso, tenía pronosticado:
Año y medio para empezar a volver a caminar, aprender de cero a caminar con mi nuevo
pie (año y medio de estar en cama y silla de ruedas hasta que la columna y pie sanaran), no
poder a volver a caminar solita, ni “normalmente” (se supone que tendría que usar
actualmente andadera o bastón); posible cojera y mal funcionamiento de mi pierna,
posible cirugía en la columna y NO VOLVER A VOLAR…

…Volví a caminar a los 2 meses y medio con andadera y la fui dejando poco a poco, nunca
usé bastón… y ¿qué creen? ya estoy volando de nuevo, ¡¡¡pude regresar a volar al circo!!!,
a entrenar y estoy aprendiendo a vivir con mi nuevo cuerpo, así que, una vez más… ¡los sueños se hacen realidad!

Aquí les va lo que me ha ayudado este tiempo:

• Antes que nada, debemos hacer caso a nuestros fisioterapeutas y ortopedistas;
ellos conocen el alcance de nuestros cuerpos y nos pueden ir orientando y
poniendo ejercicios específicos para que nuestro cuerpo sane de la mejor manera.

• Ser constantes con la rehabilitación, y SÍ, duele, es tortura china, cansa… perooooo,
jaja, nuestra meta está ahí y no debemos perderla, y es que nuestro cuerpo llegue a
su nueva mejor versión.

• ¡NO RENDIRTE! La cabeza nos juega muchas malas pasadas, pero también es cierto
que nadie te va a echar más porras que tú mism@, porque nadie desea más que tú
regresar a tu “realidad”.

• Aceptar que tienes un nuevo cuerpo, no va a ser como era antes, y yo creo que eso
es lo más difícil, pero, si lo aceptas, poco a poco vas a ver que tu cuerpo tiene
memoria, y te vas a adaptar a esa nueva oportunidad que tienes de poder hacer las
cosas.

Si quieres que sea como antes y te aferras a ese cuerpo previo al accidente, es muy
posible que te frustres.

Yo de todo corazón te recomiendo (y yo sigo trabajando en eso, porque juro que sé
que cuesta) ir aceptando y celebrando esos logros bebés de tu nuevo cuerpo.
Recuerda que es una nueva oportunidad, y por lo tanto es volver a comenzar, volver
aprender a caminar, a moverte, a equilibrarte, a FORTALECER todos esos músculos
que por la recuperación se mantuvieron inactivos, y sobre todo fortalecer tu mente
y corazón.

• Celebrar cada pequeño triunfo, no te tortures si lo que antes te salía fácil ahora no
sale, poco a poco vas a ir encontrando formas nuevas de llegar a esa figura o a ese
movimiento, y si no, hay mil movimientos más que puedes hacer. Acuérdate que
cada cuerpo es diferente y no tienes que compararte con nadie más ni con tu
antiguo cuerpo, ahora tienes uno nuevo que te apoya y permite seguir haciendo lo
que quieres, apapáchalo y celébralo.

• No forzar de mala manera a tu nuevo cuerpo, sí, ya sé, quisiéremos regresar a todo
lo que hacíamos como lo hacíamos y para ya… pero de verdad, escucha a tu cuerpo,
él te va ir diciendo que tanto puedes dar.

Hay que aprender a reconocer los tipos de dolor, hay uno que te indica que todavía
puedes más y otro que te avisa que es el límite donde te puedes lesionar peor, por
eso es importante reconocerlos y estar acompañada de tu fisioterapeuta u
ortopedista, lo importantes es ir avanzando a tu ritmo y no lesionarte más o
lastimar a tu cuerpo peor.

Vas a ir llegando cada vez un poquito más, quizá no a la velocidad que quieres o al
punto donde quieres, pero, ¡cada avance es un logro mental y de corazón para ti!

Y ¿sabes qué?, ¡¡¡estamos viv@s!!!, eso es lo más importante de todo, valora cada minuto,
cada nueva oportunidad. Tus metas ahí están y las vas a ir logrando, te lo aseguro.
Todo esto lo comparto con mucho amor y paciencia, y no necesariamente sólo si viviste un
accidente, cada que pasamos por un periodo de recuperación o de reposo, o esta
cuarentena interminable, nuestro cuerpo cambia, acéptalo y no te rindas, cada día estás un
poquito más cerca de tu meta 🙂

Sígueme en mis redes sociales:

@adrypani en instagram y ADRIANA PANIAGUA en facebook.

 

 

 

 

 

Fotos de: Diego Hernández y Jair Basto

1 Comment

  1. Wanda Kretzer

    It’s perfect time to make some plans for the future and it is
    time to be happy. I’ve read this post and
    if I could I wish to suggest you some interesting things or tips.
    Maybe you can write next articles referring to this article.

    I want to read more things about it!

    Reply

Submit a Comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *